En 1974, la policìa encontró los cuerpos de la familia DeFeo (mamá, papá y 4 de 5 hijos) en la mansión High Hopes. El asesino fue el hijo mayor (Ronnie DeFeo), quien confesó: "le disparé primero a mi papá, luego a mi madre. No podia bajar el rifle ni dejar de disparar; fue como si algo se hubiera apoderado de mi". Tambièn dijo que unas voces que decian "Mátalos, mátalos", "acaba con ellos", lo obligaron a cometer esos crìmenes.
Después de los asesinatos de los DeFeo, otra familia compró la casa, pero sólo vivieron ahí 28 dìas por que el padre empezo a escuchar las mismas voces. Huyeron sin coger sus cosas. Actualmente las personas que van a visitarla dicen que hay cambios bruscos de temperatura, ven sombras y experimentan la sensación de estar acompañados.